Un tío bueno acaba de ser abandonado por su novio de toda la vida. Está solo en un banco de la calle, compadeciéndose de sí mismo. Cuando un total desconocido se le acerca y empieza a charlar con él, deja la oportunidad de engañarle y encontrar algo de consuelo al mismo tiempo. El desconocido está colgado como un caballo y sabe que su culo va a recibir mucha acción. ¡Una sesión improvisada llena de promesas !